Las pantallas táctiles son una de las invenciones tecnológicas más destacadas de los últimos años. Gracias a ellas y a dispositivos que se benefician de ellas, como las tablets y los smartphones, la forma en que accedemos a la información ha cambiado para siempre. Sin embargo, para los internautas más tradicionales, el uso de un monitor y un mouse sigue siendo su opción favorita.
Para lograr el máximo desempeño en sus juegos favoritos, los gamers requieren accesorios especializados. No obstante, la adquisición de un mouse de este tipo no siempre resulta indispensable, ya que un mouse convencional ya cubre las necesidades de un usuario promedio. Por tanto, en este post profundizaremos en las ventajas y desventajas de comprar un mouse gamer, a fin de qué puedas decidir si en verdad vale la pena comprar uno dependiendo del uso que piensas darle.
El rendimiento de un mouse viene determinado principalmente por su sensibilidad, la cual se mide en PPI (puntos por pulgada). Este valor controla la rapidez con la que se mueve el cursor en la pantalla del ordenador. Cuanto más alto sea el factor DPI, más fluidos serán los movimientos de muñeca del jugador, debido al movimiento más rápido del puntero en la pantalla.
Los botones especiales de los mouses para juegos permiten modificar los DPI del mismo mientras se juega, lo que resulta realmente cómodo e intuitivo. La mayoría de los mouses diseñados para jugar oscilan entre los 400 y los 26.000 DPI, lo que da a los consumidores un amplio abanico de opciones entre las que escoger.
Un factor clave a la hora de elegir un mouse para juegos es que su diseño ofrezca comodidad para un uso prolongado y se adapte bien a la mano en una posición natural.
Si alguna vez has sufrido dolor de manos o muñecas mientras estás jugando, es mejor que elijas un mouse con diseño ergonómico, indistintamente de si está diseñado para jugar o para darle un uso convencional.
El diseño plano de los mouses convencionales puede ser bastante limitante, especialmente para los usuarios que utilizan sus ordenadores de manera prolongada e ininterrumpida.
Una de las características más útiles de los mouses para juegos es la capacidad de grabar un conjunto de comandos y ejecutarlos al oprimir un botón. Esta función se conoce como macros y es una de las más utilizadas al momento de jugar juegos, pero también pueden usarse para lanzar ventanas del navegador, correos electrónicos, etc. Los botones macro pueden ser increíblemente beneficiosos para la multitarea, tanto si eres un apasionado por los videojuegos o un usuario convencional.
Los productos diseñados para juegos suelen tener un precio significativamente mayor que las versiones convencionales de los mismos. Esto también se aplica a los mouses. Los distintos fabricantes suelen vender estos gadgets entre los 40 y los 200 dólares. Los modelos premium son mucho más cómodos para jugar y pueden adaptarse al uso específico que el usuario desee darles.
Se pueden modificar los ajustes y la iluminación RGB con un software adicional, incluyendo características como la sensibilidad, los botones macro y la tasa de sondeo. Si estas características no son cruciales para ti, un mouse convencional podría ser suficiente para ti. Esto te permitirá ahorrar dinero, ya que su precio suele oscilar entre los $10 y los $20, aunque no tendrás acceso a ninguna función especial para jugar juegos.
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